Atesorar los mandamientos

Leyendo Proverbios 7: 1-3 que dice: "Hijo mío, guarda mis razones, y atesora contigo mis mandamientos. Guarda mis mandamientos y vivirás, y mi ley como las niñas de tus ojos. Lígalos a tus dedos, escríbelos en la tabla de tu corazón";  empecé a pensar sobre el significado de ello.

Comprendí que en la Biblia, encontramos diversos versículos que hablan sobre guardar  y obedecer los mandamientos, pues todos ellos llevan en sí mismos promesas de bendiciones.

Y es que hay toda una lógica en ello; es decir, si nosotros nos detenemos a analizar cuáles son los mandamientos establecidos por el Eterno, nos daremos cuenta, que cada uno de ellos tienes un sólo fin; y ese es salvaguardarnos de vicisitudes y problemas innecesarios en nuestro vivir; incluso de aquellas consecuencias negativas productos de nuestras pobres decisiones.

El Santísimo, no desea que nosotros suframos más allá de lo debido; sino que al tomar en cuenta en cuenta sus mandamientos y preceptos en lo que hacemos (ligarlos a nuestros dedos) y en lo que pensamos, sentimos y decidimos (escribirlos en la tabla de nuestro corazón), no sólo honramos a nuestro Dios, sino que además tendremos una vida plena.

Debemos pensar en el Todopoderoso como aquel padre/madre amoroso que nos da sabiduría a través de consejos con el fin de no vernos sufrir; pues su amor es tan grande que nuestro dolor le conmueve.

Recuerda siempre que nuestro Señor, estará junto a tí en todo momento, envolviéndote en sus brazos de amor.