¿Aconsejando a todos?
Hay una lección que aprendí hace algunos años, y es que aveces nuestro consejo o corrección no es bien recibido por otras personas, de quienes nosotros pensamos que pueden valorarlo.
Y es que, debemos tener en cuenta lo que dice Proverbios 9:7-8 "El que corrige al escarnecedor, se acarrea afrenta; el que reprende al impío, se atrae mancha. No reprendas al escarnecedor, para que no te aborrezca; corrige al sabio, y te amará." ; lo cual no está indicando que hay personas a quienes no debemos (por más que querramos o apreciemos) brindarles un consejo, intentar que entren en razón o corregirle, porque contrario al agradecimiento, obtendremos solo ira de su parte.
Sin embargo, habrán personas, para quienes nuestro consejo sea una bendición.
En todo caso, debemos pedirle al Eterno de su sabiduría para que nos guíe y nos permita distinguir entre alguien que realmente va a apreciar lo que intentamos transmitirle, de aquella en la que puede convertirse incluso en un enemigo.
Debiendo tratar de ser siempre instrumentos de su paz, y ser reflejos de su amor.
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