Esperar en Dios
Hace unos días, hablaba con una amiga que ya ronda los 35 años y aún no ha logrado cumplir su deseo de casarse, formar una familia y tener hijos; llegando a tal grado de frustración que culpa al Eterno de sus fracasos amorosos; sin siquiera tener en consideración su parte de responsabilidad en ello, dando como resultado un enfriamiento espiritual y deseos de alejarse de todo aquello que conlleve el nombre de Dios, en cualquiera de sus formas. Me decía que cómo era posible, que mujeres con un largo historial de acciones no tan apegadas a la moral y con cuestionables estrategias, pudiesen ya tener una familia formada, y ella que se había esforzado y hecho "lo correcto" era tratada con desamor y como una simple opción por su contraparte masculina, a pesar que ella había dado todo de su parte siendo detallista, amorosa, y una buena mujer. Después de esa conversación, empecé a reflexionar un poco más allá sobre aquellas cosas que a nuestros ojos nos parecen injustas; pues e...